Transcripción:
"No permitiré que nos arrebaten lo que hemos ganado legítimamente en las urnas", afirma
la alcaldesa electa.
Un intento encabezado por los magistrados Armando Ambriz y Osiris Vázquez, busca
acusarla sin fundamentos de violencia política en razón de género.
"No lucho por un cargo, lucho porque están en juego las libertades más básicas de la
ciudadanía en una democracia", asegura.
"No permitiré que nos arrebaten lo que hemos ganado legítimamente en las urnas", fundamentó la
alcaldesa electa de Cuauhtémoc, Ale Rojo de la Vega, como el motivo de su lucha en defensa de la
voluntad ciudadana ante un nuevo intento arbitrario del Tribunal Electoral de la Ciudad de México
(TECDMX) por anular la elección del pasado 2 de junio, en la que la ciudadanía se expresó libremente
en las urnas eligiéndola a ella como la nueva alcaldesa.
"No peleo por un cargo, un presupuesto, por ser alcaldesa. Estoy dando la lucha porque lo que está
en juego son las libertades más básicas de las y los ciudadanos en una democracia", agregó.
En conferencia de prensa llevada a cabo este mediodía en las instalaciones del Instituto Nacional
Electoral (INE), la alcaldesa electa advirtió un posible intento encabezado por los magistrados
Armando Ambriz y Osiris Vázquez (cercanos al grupo político-familiar de la candidata perdedora en
los pasados comicios) para anular su victoria en las elecciones, acusándola, sin fundamentos, de
ejercer violencia política de género, de acuerdo al análisis de especialistas, el intento de la candidata
derrotada no tiene asidero legal ni sustancia jurídica carece de fundamento y representa solamente
una componenda política para arrebatar la demarcación.
Rojo de la Vega señaló las tácticas desesperadas a las que está recurriendo la candidata derrotada,
toda vez que ni el recuento de la elección, ni la demanda por topes de campaña fueron válidos, en
ambas ocasiones la sala regional y la autoridad electoral le dieron la razón a Rojo de la Vega. El
recurso por violencia política con base en género representa el tercer intento de golpe a la
democracia de la candidata derrotada; recordó Rojo de la Vega, que durante la elección nunca se
presentó una denuncia en su contra por ese motivo, fue sólo después de la derrota en la que se
recurrió a esta causal. "Están distorsionando la figura de violencia política de género, un mecanismo
creado para proteger a las mujeres, no para justificar una derrota que no pueden aceptar",
sentenció.
La alcaldesa electa detalló las irregularidades y los intentos de sabotaje que enfrentó durante la
campaña, desde la destrucción de su propaganda hasta ataques mediáticos que incluso pusieron en
riesgo la integridad de su familia. A pesar de estos obstáculos, logró la victoria, un hecho que, según
afirma, sus oponentes ahora buscan deshacer a través de medios legales y presión política.
"No saben perder y ahora quieren arrebatar lo que no pudieron ganar limpiamente", expresó Ale
Rojo y rechazó categóricamente las acusaciones en su contra, asegurando que son infundadas y que
carecen de sustento legal. "No ejercí violencia política y la elección no debe ser anulada por
caprichos de quienes no aceptan la realidad", afirmó.
En un mensaje claro, la también activista llamó a la ciudadanía y a las autoridades a cerrar filas en
defensa de la democracia y convocó a una concentración ciudadana el próximo domingo 18 de
agosto en la Diana Cazadora. "Basta de torcer la ley para satisfacer intereses personales. La voluntad
de la gente debe ser respetada. En la Cuauhtémoc ya decidimos", enfatizó.
Ale Rojo de la Vega estuvo acompañada por Paulina Amozurrutia Navarro de la asociación Educación
con Rumbo/Unión Mujer, quien expresó su respaldo como parte del movimiento feminista: "lo
único que pedimos es que pongan los ojos mediáticos en este tema. Sí, se ganó, pero sí, pueden
quitarnos la elección, como les gusta hacer las cosas", sentenció.
Por su parte, Ana Laura Valenzuela Sánchez, diputada federal del PAN lamentó que el grupo político
familiar que respalda a la candidata derrotada esté haciendo uso del poder que ostentan para cobrar
favores políticos, abusar de las instituciones y quitarles a los ciudadanos de la Cuauhtémoc lo que
ellos ya decidieron, que Ale represente a la alcaldía.
Finalmente, la alcaldesa electa advirtió sobre los peligros de permitir que las instituciones sean
manipuladas por intereses políticos, subrayando que la Ciudad de México no puede convertirse en
un escenario de autoritarismo y represión e hizo un llamado a la jefa de Gobierno electa, Clara
Brugada a dejar atrás los colores partidistas y trabajar por las y los habitantes de la Alcaldía
Cuauhtémoc.