Frentes Políticos
Resumen:
1. Austeridad “productiva”. El Senado de la LXV Legislatura, bajo liderazgo de Ricardo Monreal, dejó 72.6 mdp, aportando al actual presidente, Adán Augusto López, una caja fuerte más llena que vacía. Sin embargo, la nueva administración se estrenó con despidos masivos y pretextos de falta de recursos, tardando casi dos meses en pagar liquidaciones. Ahora dicen que cancelarán servicios ya cubiertos para “ahorrar más”. Pero ¿a costa de quién? Mientras las finanzas están supuestamente en orden, la realidad es que la austeridad recae sobre los trabajadores, no sobre los privilegios del Senado. Ironías de la política. Monreal entregó cuentas y bien.
2. Impostura. Rosario Piedra Ibarra llegó a la CNDH más por apellido que por capacidad. Su nombramiento en 2019 ya fue polémico, pero su gestión la superó con denuncias ignoradas, recomendaciones tibias y una marcada cercanía con el poder al que debía cuestionar. El caso Ayotzinapa, por ejemplo, quedó estancado en su oficina. Ahora, en su intento de reelección, promete “autonomía”. Los críticos hacia Piedra Ibarra señalan que vive en un mundo de simulación, más cómoda con el silencio que con el conflicto. Que, si se queda, sería como apagar las luces de la CNDH y no volver a encenderlas más.
3. Empoderamiento. Geraldine Ponce se coloca al frente de la Conferencia Nacional de Seguridad Pública Municipal, un logro que no llegó por casualidad. Sus programas en Tepic, como el Código Violeta, han marcado la diferencia en la seguridad de las mujeres, con respuestas rápidas y un enfoque integral de apoyo. Es la primera nayarita en asumir este cargo, demostrando que el liderazgo puede ir más allá de promesas vacías. Mientras tanto, Miguel Ángel Navarro, el gobernador, vive en un mundo paralelo, vendiendo espejismos más que resultados. La diferencia entre ambos es clara, el trabajo real frente a ilusiones de gobierno. ¡Felicidades!
4. Controversia eterna. Falleció Juan Velásquez, conocido como El Abogado del Diablo por su habilidad para defender a figuras polémicas del poder político mexicano. Entre sus clientes destacan Arturo Durazo Moreno, el poderoso jefe de la policía en el sexenio de José López Portillo, así como el expresidente Luis Echeverría. En vida, Velásquez se enorgullecía de nunca haber perdido un juicio que implicara la prisión de sus defendidos, una hazaña que definió sus 52 años de carrera penalista. La Facultad de Derecho de la UNAM, donde fue catedrático, expresó su pesar por la pérdida.
5. Desaparición conveniente. Cynthia López Castro, senadora del PRI, se esfumó justo antes de la votación clave para impedir impugnaciones a la Constitución. Asegura que no hubo negociación con Morena y que su ausencia se debió a un malestar repentino. Su justificación es extraña, pues afirma que su teléfono “se desconfiguró” y que por eso no supo si la sacaron del chat de su bancada. Mientras tanto, sus colegas priistas la señalan de incoherente, pues ya había cambiado su voto en la reforma judicial y mantiene amistad con figuras de Morena, como Adán Augusto López. Ingenuidad es lo que menos impera en el ámbito político.
2. Impostura. Rosario Piedra Ibarra llegó a la CNDH más por apellido que por capacidad. Su nombramiento en 2019 ya fue polémico, pero su gestión la superó con denuncias ignoradas, recomendaciones tibias y una marcada cercanía con el poder al que debía cuestionar. El caso Ayotzinapa, por ejemplo, quedó estancado en su oficina. Ahora, en su intento de reelección, promete “autonomía”. Los críticos hacia Piedra Ibarra señalan que vive en un mundo de simulación, más cómoda con el silencio que con el conflicto. Que, si se queda, sería como apagar las luces de la CNDH y no volver a encenderlas más.
3. Empoderamiento. Geraldine Ponce se coloca al frente de la Conferencia Nacional de Seguridad Pública Municipal, un logro que no llegó por casualidad. Sus programas en Tepic, como el Código Violeta, han marcado la diferencia en la seguridad de las mujeres, con respuestas rápidas y un enfoque integral de apoyo. Es la primera nayarita en asumir este cargo, demostrando que el liderazgo puede ir más allá de promesas vacías. Mientras tanto, Miguel Ángel Navarro, el gobernador, vive en un mundo paralelo, vendiendo espejismos más que resultados. La diferencia entre ambos es clara, el trabajo real frente a ilusiones de gobierno. ¡Felicidades!
4. Controversia eterna. Falleció Juan Velásquez, conocido como El Abogado del Diablo por su habilidad para defender a figuras polémicas del poder político mexicano. Entre sus clientes destacan Arturo Durazo Moreno, el poderoso jefe de la policía en el sexenio de José López Portillo, así como el expresidente Luis Echeverría. En vida, Velásquez se enorgullecía de nunca haber perdido un juicio que implicara la prisión de sus defendidos, una hazaña que definió sus 52 años de carrera penalista. La Facultad de Derecho de la UNAM, donde fue catedrático, expresó su pesar por la pérdida.
5. Desaparición conveniente. Cynthia López Castro, senadora del PRI, se esfumó justo antes de la votación clave para impedir impugnaciones a la Constitución. Asegura que no hubo negociación con Morena y que su ausencia se debió a un malestar repentino. Su justificación es extraña, pues afirma que su teléfono “se desconfiguró” y que por eso no supo si la sacaron del chat de su bancada. Mientras tanto, sus colegas priistas la señalan de incoherente, pues ya había cambiado su voto en la reforma judicial y mantiene amistad con figuras de Morena, como Adán Augusto López. Ingenuidad es lo que menos impera en el ámbito político.
Transcripción:
1. Austeridad “productiva”. El Senado de la LXV Legislatura, bajo liderazgo de Ricardo Monreal, dejó 72.6 mdp, aportando al actual presidente, Adán Augusto López, una caja fuerte más llena que vacía. Sin embargo, la nueva administración se estrenó con despidos masivos y pretextos de falta de recursos, tardando casi dos meses en pagar liquidaciones. Ahora dicen que cancelarán servicios ya cubiertos para “ahorrar más”. Pero ¿a costa de quién? Mientras las finanzas están supuestamente en orden, la realidad es que la austeridad recae sobre los trabajadores, no sobre los privilegios del Senado. Ironías de la política. Monreal entregó cuentas y bien.
2. Impostura. Rosario Piedra Ibarra llegó a la CNDH más por apellido que por capacidad. Su nombramiento en 2019 ya fue polémico, pero su gestión la superó con denuncias ignoradas, recomendaciones tibias y una marcada cercanía con el poder al que debía cuestionar. El caso Ayotzinapa, por ejemplo, quedó estancado en su oficina. Ahora, en su intento de reelección, promete “autonomía”. Los críticos hacia Piedra Ibarra señalan que vive en un mundo de simulación, más cómoda con el silencio que con el conflicto. Que, si se queda, sería como apagar las luces de la CNDH y no volver a encenderlas más.
3. Empoderamiento. Geraldine Ponce se coloca al frente de la Conferencia Nacional de Seguridad Pública Municipal, un logro que no llegó por casualidad. Sus programas en Tepic, como el Código Violeta, han marcado la diferencia en la seguridad de las mujeres, con respuestas rápidas y un enfoque integral de apoyo. Es la primera nayarita en asumir este cargo, demostrando que el liderazgo puede ir más allá de promesas vacías. Mientras tanto, Miguel Ángel Navarro, el gobernador, vive en un mundo paralelo, vendiendo espejismos más que resultados. La diferencia entre ambos es clara, el trabajo real frente a ilusiones de gobierno. ¡Felicidades!
4. Controversia eterna. Falleció Juan Velásquez, conocido como El Abogado del Diablo por su habilidad para defender a figuras polémicas del poder político mexicano. Entre sus clientes destacan Arturo Durazo Moreno, el poderoso jefe de la policía en el sexenio de José López Portillo, así como el expresidente Luis Echeverría. En vida, Velásquez se enorgullecía de nunca haber perdido un juicio que implicara la prisión de sus defendidos, una hazaña que definió sus 52 años de carrera penalista. La Facultad de Derecho de la UNAM, donde fue catedrático, expresó su pesar por la pérdida.
5. Desaparición conveniente. Cynthia López Castro, senadora del PRI, se esfumó justo antes de la votación clave para impedir impugnaciones a la Constitución. Asegura que no hubo negociación con Morena y que su ausencia se debió a un malestar repentino. Su justificación es extraña, pues afirma que su teléfono “se desconfiguró” y que por eso no supo si la sacaron del chat de su bancada. Mientras tanto, sus colegas priistas la señalan de incoherente, pues ya había cambiado su voto en la reforma judicial y mantiene amistad con figuras de Morena, como Adán Augusto López. Ingenuidad es lo que menos impera en el ámbito político.
2. Impostura. Rosario Piedra Ibarra llegó a la CNDH más por apellido que por capacidad. Su nombramiento en 2019 ya fue polémico, pero su gestión la superó con denuncias ignoradas, recomendaciones tibias y una marcada cercanía con el poder al que debía cuestionar. El caso Ayotzinapa, por ejemplo, quedó estancado en su oficina. Ahora, en su intento de reelección, promete “autonomía”. Los críticos hacia Piedra Ibarra señalan que vive en un mundo de simulación, más cómoda con el silencio que con el conflicto. Que, si se queda, sería como apagar las luces de la CNDH y no volver a encenderlas más.
3. Empoderamiento. Geraldine Ponce se coloca al frente de la Conferencia Nacional de Seguridad Pública Municipal, un logro que no llegó por casualidad. Sus programas en Tepic, como el Código Violeta, han marcado la diferencia en la seguridad de las mujeres, con respuestas rápidas y un enfoque integral de apoyo. Es la primera nayarita en asumir este cargo, demostrando que el liderazgo puede ir más allá de promesas vacías. Mientras tanto, Miguel Ángel Navarro, el gobernador, vive en un mundo paralelo, vendiendo espejismos más que resultados. La diferencia entre ambos es clara, el trabajo real frente a ilusiones de gobierno. ¡Felicidades!
4. Controversia eterna. Falleció Juan Velásquez, conocido como El Abogado del Diablo por su habilidad para defender a figuras polémicas del poder político mexicano. Entre sus clientes destacan Arturo Durazo Moreno, el poderoso jefe de la policía en el sexenio de José López Portillo, así como el expresidente Luis Echeverría. En vida, Velásquez se enorgullecía de nunca haber perdido un juicio que implicara la prisión de sus defendidos, una hazaña que definió sus 52 años de carrera penalista. La Facultad de Derecho de la UNAM, donde fue catedrático, expresó su pesar por la pérdida.
5. Desaparición conveniente. Cynthia López Castro, senadora del PRI, se esfumó justo antes de la votación clave para impedir impugnaciones a la Constitución. Asegura que no hubo negociación con Morena y que su ausencia se debió a un malestar repentino. Su justificación es extraña, pues afirma que su teléfono “se desconfiguró” y que por eso no supo si la sacaron del chat de su bancada. Mientras tanto, sus colegas priistas la señalan de incoherente, pues ya había cambiado su voto en la reforma judicial y mantiene amistad con figuras de Morena, como Adán Augusto López. Ingenuidad es lo que menos impera en el ámbito político.