Alessandra Rojo de la Vega denuncia al Tribunal Electoral de la CDMX por acusaciones infundadas de violencia política contra Catalina Monreal


Resumen:

Alessandra Rojo de la Vega ha denunciado al Tribunal Electoral de la Ciudad de México por acusarla de violencia política en contra de Catalina Monreal, a quien según ella, se le atribuye dicha violencia por el simple hecho de mencionar su apellido. Rojo de la Vega argumenta que esta acusación carece de pruebas y contradice un fallo anterior del mismo tribunal que la favoreció.

Asimismo, critica la invención del término familismo por parte de sus opositores y cuestiona las pruebas presentadas por el tribunal, las cuales se basan en quejas de la candidata de Morena, Catalina Monreal. Rojo de la Vega sostiene que el Instituto Electoral de la Ciudad de México ya había determinado que no existía violencia política de género en esas quejas, decisiones que nunca fueron impugnadas.

Además, menciona un dictamen emitido en la vía penal en el que no tiene participación, lo que refuerza su postura de que las acusaciones son infundadas.

Transcripción:

TANIA GÓMEZ, CONDUCTORA: Por su parte, Alessandra Rojo de la Vega, dijo que el Tribunal Electoral de la Ciudad de México la acusa de violencia política en contra de Catalina Monreal sin tener pruebas, y que anteriormente el mismo Instituto ya había dado un fallo a su favor, por lo que esta resolución le parece contradictoria.

ALESSANDRA ROJO DE LA VEGA, ALCALDESA DESTITUIDA: Que según ellos, nombrar a alguien por su apellido, a Catalina Monreal, constituye un acto de violencia de género. Los compadres criminales contra la democracia hasta se inventaron un nuevo término, el de familismo.

¿Y qué pruebas presenta el tribunal? Utiliza quejas interpuestas por la candidata de Morena, en las que el propio Instituto Electoral de la Ciudad de México determinó que no existe violencia política de género, determinaciones que se encuentran firmes y que nunca impugnaron.

También presentó un dictamen que fue emitido en la vía penal, en expedientes en los que yo ni siquiera tengo participación.





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