Capital Político // Meten el pie a Bertha Alcalde
Resumen:
Meten el pie a Bertha Alcalde
Transcripción:
Meten el pie a Bertha Alcalde
El grupo radical de Morena tiene la Jefatura de Gobierno, con Clarita Brugada.
Al interior de Morena dicen que el veto a Bertha Alcalde para asumir la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México se dio luego del pronunciamiento de Andrés Manuel López Beltrán, quien el sábado insinuó su intención de ir por la Jefatura de Gobierno en 2030.
Aunque el hijo del expresidente no dijo nada nuevo, pues todo el mundo sabe que quiere seguir el mismo camino de su padre, en Palacio Nacional causó molestia la impaciencia de los jóvenes de la 4T por hacerse del poder.
Los puros del movimiento ya tienen la presidencia de Morena a nivel nacional y CDMX, con Luisa María Alcalde y Héctor Díaz-Polanco, respectivamente. Aunque este último no es un jovencito, sólo estará un breve lapso y después será sustituido.
Con la llegada de Luisa María a la dirigencia nacional, arribó también Andrés Manuel Jr. como secretario de Organización del partido. Con las recientes modificaciones estatutarias, el titular del área adquiere un amplio poder en la nominación de las candidaturas guindas.
No se requiere ser genio para darse cuenta de que el secretario de Organización ya entendió cómo ganar elecciones, y que desde su cargo ampliará la base militante del oficialismo para tener el control territorial en los procesos.
Y no está mal que lo haga, desde luego, pero tras decantarse por la CDMX, López Beltrán empezó a inclinar la balanza interna, lo cual no fue bien visto por buena parte de la 4T, pues sienten que le resta margen de maniobra incluso a la presidenta.
Sorteando algunas dificultades, Alcalde había logrado el consenso para la Fiscalía, pero el revuelo que causó Andrés Jr. obligó a ponerle freno a su llegada, debido a que muchos podrían sentirse vulnerables ante los duros.
El grupo radical de Morena tiene la Jefatura de Gobierno, con Clarita Brugada; la presidencia del Congreso de la Ciudad de México, con Xóchitl Bravo; y las dirigencias nacional y local del partido, por lo que solo le faltaría el Poder Judicial.
Después de la elección de jueces y magistrados, es muy probable que también tengan el control del poder que les falta, por lo que la Fiscalía de Justicia cobra una importancia absolutamente relevante.
Pensando mal, con una fiscal identificada con el ala dura del partido, la propia presidenta no tendría la tranquilidad de que en su paso por el gobierno de la capital del país no tendría que pasar por algún tamiz.
No lo harían directamente en su contra, por supuesto, pero sí con algunos funcionarios que colaboraron con ella, lo que podría ser un gran inconveniente cuando llegue la hora de definir las candidaturas importantes.
Si Andrés Jr. busca la Jefatura de Gobierno y Brugada aspira a la presidencia de la República, en teoría no habría ningún conflicto entre ellos. Solo que la tradición señala que el titular del Ejecutivo es quien designa a su sucesor o sucesora.
Ése es el riesgo de perder el control de la Fiscalía, y ahora se ve muy cuesta arriba el camino de Bertha.
CENTAVITOS
Por cierto, la descomposición interna de Morena se está dando más rápido de lo que se esperaba, pues aunque todos sabían que, ante la falta de adversarios externos, las tribus de la 4T iban a entrar en una lucha interna —que es todavía más grave— creían que iba a tardar más. Llegar al canibalismo político es como dormir con el enemigo, pues no sabes si en la noche intentará apuñalarte o le echará veneno a tu café. Lo que viene para Morena es una implosión; a ver qué grupos son los que sobreviven.
La tradición señala que el titular del Ejecutivo es quien designa a su sucesor o sucesora.
Adrián Rueda
El grupo radical de Morena tiene la Jefatura de Gobierno, con Clarita Brugada.
Al interior de Morena dicen que el veto a Bertha Alcalde para asumir la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México se dio luego del pronunciamiento de Andrés Manuel López Beltrán, quien el sábado insinuó su intención de ir por la Jefatura de Gobierno en 2030.
Aunque el hijo del expresidente no dijo nada nuevo, pues todo el mundo sabe que quiere seguir el mismo camino de su padre, en Palacio Nacional causó molestia la impaciencia de los jóvenes de la 4T por hacerse del poder.
Los puros del movimiento ya tienen la presidencia de Morena a nivel nacional y CDMX, con Luisa María Alcalde y Héctor Díaz-Polanco, respectivamente. Aunque este último no es un jovencito, sólo estará un breve lapso y después será sustituido.
Con la llegada de Luisa María a la dirigencia nacional, arribó también Andrés Manuel Jr. como secretario de Organización del partido. Con las recientes modificaciones estatutarias, el titular del área adquiere un amplio poder en la nominación de las candidaturas guindas.
No se requiere ser genio para darse cuenta de que el secretario de Organización ya entendió cómo ganar elecciones, y que desde su cargo ampliará la base militante del oficialismo para tener el control territorial en los procesos.
Y no está mal que lo haga, desde luego, pero tras decantarse por la CDMX, López Beltrán empezó a inclinar la balanza interna, lo cual no fue bien visto por buena parte de la 4T, pues sienten que le resta margen de maniobra incluso a la presidenta.
Sorteando algunas dificultades, Alcalde había logrado el consenso para la Fiscalía, pero el revuelo que causó Andrés Jr. obligó a ponerle freno a su llegada, debido a que muchos podrían sentirse vulnerables ante los duros.
El grupo radical de Morena tiene la Jefatura de Gobierno, con Clarita Brugada; la presidencia del Congreso de la Ciudad de México, con Xóchitl Bravo; y las dirigencias nacional y local del partido, por lo que solo le faltaría el Poder Judicial.
Después de la elección de jueces y magistrados, es muy probable que también tengan el control del poder que les falta, por lo que la Fiscalía de Justicia cobra una importancia absolutamente relevante.
Pensando mal, con una fiscal identificada con el ala dura del partido, la propia presidenta no tendría la tranquilidad de que en su paso por el gobierno de la capital del país no tendría que pasar por algún tamiz.
No lo harían directamente en su contra, por supuesto, pero sí con algunos funcionarios que colaboraron con ella, lo que podría ser un gran inconveniente cuando llegue la hora de definir las candidaturas importantes.
Si Andrés Jr. busca la Jefatura de Gobierno y Brugada aspira a la presidencia de la República, en teoría no habría ningún conflicto entre ellos. Solo que la tradición señala que el titular del Ejecutivo es quien designa a su sucesor o sucesora.
Ése es el riesgo de perder el control de la Fiscalía, y ahora se ve muy cuesta arriba el camino de Bertha.
CENTAVITOS
Por cierto, la descomposición interna de Morena se está dando más rápido de lo que se esperaba, pues aunque todos sabían que, ante la falta de adversarios externos, las tribus de la 4T iban a entrar en una lucha interna —que es todavía más grave— creían que iba a tardar más. Llegar al canibalismo político es como dormir con el enemigo, pues no sabes si en la noche intentará apuñalarte o le echará veneno a tu café. Lo que viene para Morena es una implosión; a ver qué grupos son los que sobreviven.
La tradición señala que el titular del Ejecutivo es quien designa a su sucesor o sucesora.
Adrián Rueda