Resumen:
1. Sí, claro. Alejandro Moreno tiene nítido el panorama: primero su reelección, después, los problemas del Revolucionario Institucional. Alito sigue convencido de que es la opción. Pide usar las redes sociales para defender su gestión y, con suerte, alargar su mandato hasta 2028. Su plan es reflexionar sobre la crisis del partido, pero sólo si primero lo reeligen. Moreno promete una “gran reflexión” sobre los problemas políticos, económicos y sociales del PRI, como si no hubiese tenido tiempo de hacerla desde que llegó al liderazgo el 18 de agosto de 2019. Y desde entonces se le ha tachado de autoritario. El objetivo no es reformar, sino perpetuarse, se ve a leguas.
Transcripción:
1. Sí, claro. Alejandro Moreno tiene nítido el panorama: primero su reelección, después, los problemas del Revolucionario Institucional. Alito sigue convencido de que es la opción. Pide usar las redes sociales para defender su gestión y, con suerte, alargar su mandato hasta 2028. Su plan es reflexionar sobre la crisis del partido, pero sólo si primero lo reeligen. Moreno promete una “gran reflexión” sobre los problemas políticos, económicos y sociales del PRI, como si no hubiese tenido tiempo de hacerla desde que llegó al liderazgo el 18 de agosto de 2019. Y desde entonces se le ha tachado de autoritario. El objetivo no es reformar, sino perpetuarse, se ve a leguas.
2. Vergonzoso. El Comité Técnico Asesor del PREP señala al INE de Guadalupe Taddei como responsable de la deserción masiva de capacitadores, asistentes electorales, capturistas y coordinadores. La falta de salarios competitivos ha provocado un éxodo. El informe recomienda sueldos ajustados a la realidad del mercado y la inflación para frenar las renuncias. A días de las elecciones, el INE improvisó con 800 capacitadores menos, dejando las Juntas Distritales a merced del caos. El 6% del personal brilló por su ausencia en la jornada electoral. Más que un problema de dinero, es una muestra de mala planificación.
3. Preocupante. Diego Valadés, exprocurador, pone el dedo en la llaga: la subrepresentación en el Congreso amenaza la democracia. La oposición, con un 46% de votos, obtendrá sólo 26% de las curules. Valadés señala que, al ignorar el derecho de casi la mitad de los votantes, México deja de ser una democracia. El resultado será un Congreso donde la mayoría morenista legisla sin control, con la oposición reducida a un adorno. El INE y el Tribunal Electoral deben respetar la Constitución para evitar que la coalición gobernante se apropie de diputaciones que no le corresponden. La democracia no es un capricho, es un derecho.
4. Por curioso. Marko Cortés, líder nacional del PAN, fue expulsado de Venezuela por “observar” las elecciones. Acompañaba a María Corina Machado y Edmundo González, pero la policía bolivariana lo detuvo y sacó del país. Denuncia miedo e inequidad electoral, mientras que Nicolás Maduro habla de “paz o guerra” y alerta sobre un “baño de sangre” si gana la oposición. A pesar de la presión internacional y la presencia del Centro Carter, Maduro bloquea la misión de la UE y parlamentarios europeos. El resultado sigue en el aire. La democracia se la juegan ellos; ¿qué hacía Marko de metiche? ¿Le aplaudimos?
5. A pagar los daños. Luego de que las autoridades universitarias recuperaran las instalaciones de la Dirección General del CCH, cuyo director general es el doctor Benjamín Barajas Sánchez, en Ciudad Universitaria ya se tienen plenamente identificados a los estudiantes que causaron los invaluables destrozos y daño al patrimonio. Nos dicen que entre los identificados están algunos profesores. La UNAM, del rector Leonardo Lomelí Vanegas, ya tiene lista la denuncia penal y también las sanciones que aplicará a los autores de tan viles actos.