Transcripción:
En Buenavista, Michoacán, nadie sabe con certeza si el segundo al mando del grupo criminal más poderoso de la zona, Los Viagras, está vivo o muerto; si el hombre que los azotaba con extorsiones realmente fue abatido o si continúa rondando como un fantasma.
La mayoría desea creer los rumores que apuntan a que Rodolfo Sierra Santana, La Teresa, murió en algún momento de la noche del 11 de mayo en una emboscada; sin embargo, también hay quienes piensan que el violento integrante de Los Viagras fingió su deceso, como lo hizo en 2010 el hombre que le enseñó a traficar metanfetaminas, para seguir delinquiendo con una nueva identidad.
La historia de esta misteriosa muerte comenzó en internet; cuentas en redes sociales dedicadas al crimen organizado difundieron -sin confirmación oficial- que La Teresa, mano derecha de su hermano mayor Nicolás, El Gordo, fue asesinado en la frontera entre Michoacán y Jalisco junto a 15 escoltas bajo un ataque con ametrallado tipo Miniguns empuñadas por sicarios que responden a Nemesio Oseguera Cervantes, El Mencho, su enemigo a muerte líder del Cártel Jalisco Nueva Generación.
El anuncio causó de inmediato alarma entre la polición de Tierra Caliente, pues un asesinato así desata el infierno; Los Viagras son rápidos para sospechar de traiciones y su psicosis suele llevar a homicidios, secuestros y desapariciones Los 42 mil habitantes de Buenavista esperaban un latigazo furioso... que nunca llegó para sorpresa del pueblo.
Otro asombrado es el activista social más conocido del municipio: Lupe Mora, hermano del asesinado líder de autodefensas Hipólito Mora, quien cree como muchos -que todo es un montaje con la colaboración de las autoridades estatales.
Sin entierro "Cuando mataron a otro hermano de Sierra Santana en 2017 -Juan Carlos, La Sopa- lo sepultaron en Catalinas, Buenavista, que es la comunidad de donde son todos ellos.
"Se supo por todo el pueblo porque hasta al funeral llegaron policías a cuidar a la familia; esta vez no se ha sabido de ningún entierro" cuenta Lupe Moraa MILENIO desde su hogar, a unos pocos kilómetros de la casa de los Sierra Santana.
La Fiscalía de Michoacán ubica que el clan es integrado por 11 hermanos, de los cuales siete han estado en la mira de las autoridades -Nicolás, Francisco, Mariano, Gabino, Juan Carlos, Rodolfo y Daniel, pero no Valentín, Severino, Beatriz ni Bernabé- desde que en 2013 se erigieron como autodefensas o contra Los Caballeros Templarios, el grupo criminal con el que alguna vez tuvieron tratos, pero del que se distanciaron acusándose de traiciones.
Después de que el grupo criminal liderado por Servando Gómez, La Tuta, fue desarticulado, Los Viagras recibieron el respaldo de Alfredo Castillo Cervantes -excomisionado para la Seguridad y Desarrollo Integral de Michoacán en tiempos del presidente Enrique Peña Nieto-para unirse a la Policía Rural.
Se les dio placa y uniforme; arropados por el poder, los siete hermanos vivieron lo suficiente para convertirse en lo que habían jurado combatir.
Además de expandir sus actividades al secuestro y sicariato, en la actualidad son acusados de cobrar extorsiones altísimas para supuestamente financiar la protección del municipio frente a la invasión del cártel Jalisco; uno de los cobradores más despiadados es-o era- La Teresa.
Al día siguiente de la "emboscada", el 12 de mayo, el gobierno federal registró cero muertos en Michoacán y en Guerrero.
El antecedente
MILENIO solicitó información sobre la muerte de Rodolfo a las áreas de comunicación social de las fiscalías de Michoacán y Guerrero; ambas dependencias respondieron que no tenían datos oficiales al respecto.
"Yo digo que puede ser que la esté jugando así: darse por muerto, ya ve que es algo que les gusta hacer", considera Lupe Mora, hoy candidato a la presidencia municipal de Buenavista por el partido local Tiempo X México.
No sería la primera vez que se rumora que un hermano Sierra Santana finge su deceso; el más joven de todos, Daniel, El Chaco, murió oficialmente en Tumbiscatío, Michoacán, en vísperas del Año Nuevo 2024 por un explosivo; aunque en ocasión sí se realizó un funeral en la casa familiar de Catalinas, Buenavista, nadie vio su cuerpo.
"Acuérdese que el líder de Los Caballeros Templarios una vez se fingió muerto) y el gobierno tapó eso", añade Mora, refiriéndose a Nazario Moreno González, El Chayo o El Más Loco, mentor de Los Viagras.
La "exclusiva"
En marzo pasado, blogs dedicados al crimen organizado anunciaron el enésimo deceso de Nemesio Oseguera; los mismos espacios digitales donde tres veces han matado a Ismael El Mayo Zambada e incontables veces dieron la "exclusiva" del fallecimiento por causas naturales de Juan José de Jesús Esparragoza Moreno, El Azul.
Son cuentas herederas de un negocio de clics que en 2010 anunciaron la primera de dos muertes de Heriberto Lazcano, El Z-3; las mismas que aún especulan bre el lujoso destino al que se fue a vacacionar el verdadero Amado Carrillo, El Señor de los Cielos.
Muerto o no, la influencia de Rodolfo Sierra Santana aún se siente en Buenavista; sus hermanos, especialmente Nicolás, siguen siendo los electores reales en el municipio.
Para Lupe Mora, todas las candidaturas a la presidencia municipal -excepto la suya- tienen el visto bueno de Los Viagras, quienes han fondeado campañas de morenistas, priistas, perredistas y panistas paras asegurar que quien gane les deba favores en los próximos tres años.
Los Viagras cumplen su promesa y quieren aprovechar su poder para controlar el municipio de Buenavista, su ganadería y sus grandes cultivos de limón, jitomate, papaya y maíz.
Y van a intentarlo como sea: estando vivos o muertos.