Resumen:
Familiares de los 17 comerciantes desaparecidos desde el pasado 21 de octubre acudieron al Servicio Médico Forense (Semefo) de Chilpancingo, Guerrero, para identificar los restos de los cuerpos que fueron encontrados en la batea de una camioneta la noche del miércoles frente al hotel Parador del Marqués. Hasta la tarde de ayer, cinco fueron reconocidos como parte del grupo que salió de Chautipan rumbo a Chilapa, donde no se supo más de ellos.
Transcripción:
Familiares de los 17 comerciantes desaparecidos desde el pasado 21 de octubre acudieron al Servicio Médico Forense (Semefo) de Chilpancingo, Guerrero, para identificar los restos de los cuerpos que fueron encontrados en la batea de una camioneta la noche del miércoles frente al hotel Parador del Marqués. Hasta la tarde de ayer, cinco fueron reconocidos como parte del grupo que salió de Chautipan rumbo a Chilapa, donde no se supo más de ellos.
Fue cerca de las 11 horas de ayer cuando los pobladores de Chautipan se presentaron en las instalaciones del Semefo para identificar los restos. El proceso fue lento, ya que los cuerpos estaban desmembrados y los forenses debieron unir las partes.
De acuerdo con la Fiscalía General del Estado (FGE), el miércoles fue abandonada una camioneta blanca, con placas de circulación del estado de Guerrero, en la entrada del hotel Parador del Marqués. La unidad motriz tenía las puertas abiertas, el motor encendido, así como las luces de precaución.
Los familiares paulatinamente identificaron a los fallecidos, entre ellos Raymundo Santos Francisco, de 13 años; Abraham Reyes Cayetano, de 15; Ángel Barrera Millán, de 13; Clara Francisco, de 30; y Flor Itulia Cabrera, de 53 años, todos originarios de la comunidad de Chautipan y parte del grupo de comerciantes que desapareció tras acudir a la localidad de El Epazote a vender trastes para el hogar.
En días previos, circuló un video en redes sociales en el que aparece un joven identificado como Ángel Barrera, quien declaró ser parte del grupo delictivo Los Jaleacos y que fue a El Epazote "a ver cómo estaba el asunto".
Fue el 21 de octubre cuando salió el primer grupo de personas de Chautipan, en la sierra de Chilpancingo, para ir a vender trastes en El Epazote, un pueblo perteneciente a Chilapa de Álvarez, que se sitúa justo en las colindancias con el municipio de Quechultenango.
Un día después salió otro grupo de vendedores y, de acuerdo con sus familiares, ese día se tuvo contacto con ellos, quienes informaron que estaban en la comunidad El Epazote y que por la tarde les volverían a marcar, pero ya no tuvieron comunicación.
Los familiares de los desaparecidos realizaron una protesta el 1 de noviembre en las instalaciones de la FGE para demandar que se localicen a los comerciantes, y en ese lugar los quejosos informaron que eran 17 las personas que salieron de Chautipan y con las que se perdió comunicación.
Al día siguiente, la FGE emitió una recompensa de un millón de pesos para quien ofreciera información que permitiera la localización de este grupo de comerciantes.
El pasado martes, el Ejército anunció el despliegue de tropas de caballería y fuerzas especiales en la zona donde desaparecieron los 17 comerciantes, y un comandante de la 35 Zona Militar estableció que fueron plagiados por el grupo delictivo Los Ardillos.
El operativo estuvo apoyado por al menos tres helicópteros Blackhawk artillados que se desplegaron en la zona, donde, además de realizar tareas para ubicar a los comerciantes, buscaban a los miembros del grupo delincuencial.
En otro hecho, los cuerpos de cuatro personas con visibles huellas de tortura y atadas de manos fueron abandonados en el interior de un automóvil en las primeras horas de este jueves en la colonia Centro, en Acapulco.
Los cuerpos fueron reconocidos como parte del grupo que salió de Chautipan; tres son menores.
La Fiscalía informó que los 11 cuerpos fueron abandonados el miércoles en una camioneta en Chilpancingo, Guerrero.
Según familiares de los comerciantes, son 17 las personas desaparecidas que salieron de Chautipan rumbo a El Epazote, Guerrero.