Resumen:
En su último informe de labores, la ministra Norma Piña, presidenta de la Suprema Corte de Justicia, abordó la reforma judicial y criticó al Poder Judicial, advirtiendo sobre el riesgo a los derechos humanos en México.
Piña destacó la existencia de dos bloques en la Corte: uno liderado por ella y otro conformado por ministras afines a la administración actual, incluyendo al ministro Pérez Dayán.
La ministra cuestionó la narrativa oficial sobre la reforma, calificándola de posverdad y afirmando que ha desmantelado la autonomía de la Corte.
El evento, marcado por la ausencia de figuras clave, reflejó la división en el Poder Judicial de cara a los cambios previstos para 2025.
Transcripción:
SALVADOR GARCÍA SOTO, CONDUCTOR: Decía José Alfredo Jiménez en aquella gran canción: "Tómate esta botella conmigo y en el último trago nos vamos", algo así les dijo hoy la ministra Norma Piña, todavía presidenta de la Suprema Corte de Justicia, a los ministros a los que invitó a su informe, porque creo que no asistieron la totalidad, están muy divididos.
La verdad es que se han hecho dos bloques en la Corte, uno, el bloque que encabeza Norma Piña, que tiene ahí algunos ministros, cinco o seis de su lado, y los otros que están en otro bloque, que son las ministras afines a las 4T, más el ministro Pérez Dayán, que ya también lo sumaron a ese bloque después de que le dio su voto a favor para validar o para desechar, más bien, las acciones de inconstitucionalidad en contra de esta reforma.
El caso es que la todavía presidenta Norma Piña hizo su último informe, habló de temas como la reforma judicial, también comentó sobre estos temas importantes, pues básicamente la ministra Piña hace una fuerte crítica al Poder Judicial, dice que ahí están en riesgo los derechos humanos en México, dice que esta reforma vendió un discurso falso, una mentira que de tanto repetirse por la propaganda del gobierno, pues muchos ya la consideran verdad.
Eso de que vamos a tener un mejor Poder Judicial o una mejor justicia, pues es algo que todavía está muy en duda si uno ve el proceso como se está llevando a cabo para elegir a los nuevos jueces, ministros y magistrados. Escuchemos parte de lo que dijo hoy la ministra Norma Piña en este último informe de labores.
NORMA PIÑA, MINISTRA DE LA SCJN: No es sólo una cuestión de leyes y tribunales, es una cuestión de derechos humanos, de equidad, de ética y de dignidad que involucra a todas las autoridades de los distintos niveles de gobierno.
Los derechos humanos están en riesgo permanente cuando el poder no puede ser contenido, frenado y controlado. Es que se está innovando a partir de una narrativa falsa, infundada, pero repetida tan consistentemente que ha parecido convertirse en verdad. Nos encontramos, entonces, ante un caso típico de posverdad, en el que las apelaciones a las emociones, a las creencias y a los sentimientos han tenido más influencia en la formación de la opinión pública y de los actores políticos que los hechos objetivos y verificados.
SALVADOR GARCÍA SOTO: Pues ahí está la ministra Norma Piña hablando de la posverdad, diciendo que fue lo que hicieron con la reforma judicial, a fuerza de repetir un discurso tenemos un Poder Judicial corrupto. Yo no digo que no había corrupción, la había, por supuesto, pero eso de decir que todo estaba podrido y que todos los jueces y todos los magistrados y todos los ministros eran corruptos, pues fue una grave generalización que se hizo efectivamente desde la 4T, desde el sexenio pasado, lo continuó la actual presidenta y terminaron pues por desmantelar a esta Corte Suprema autónoma que habíamos logrado alcanzar los mexicanos después de más de tres décadas de haber estado fortaleciendo al Poder Judicial.
Hoy vamos a tener un nuevo modelo judicial que todavía no sabemos cómo va a funcionar, si va a funcionar bien, porque se está haciendo esta renovación a partir de las votaciones que habrá el próximo 2 de junio, pero bueno, pues es lo que dice hoy la ministra Norma Piña.
Oiga, y pues fue un gabinete, fue un, perdóname, un informe totalmente desairado, ¿no? Ya no hubo, no hablemos de la presidenta Claudia Sheinbaum, que creo que ni debe haber contestado la invitación. No hubo nadie del Gabinete, no hubo ningún invitado especial, algún gobernador como solían pasar, o presidentes del Congreso, presidentes de los otros poderes, pues ninguno. Normalmente era tradición que hay en esos eventos de informe de un presidente de la Corte o presidenta, como en este caso, estuviera el titular del Ejecutivo, la Presidencia de la República, la gente del Congreso.
Bueno, creo que ni siquiera los ministros estuvieron completos, no sé si todos, todos los ministros, no asistieron los 11 ministros, ni Lenia Batres, ni Yasmín Esquivel, ni Loretta Ortiz se presentaron al informe de Norma Piña, tampoco se presentó Mónica Soto, la Presidenta del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, ni tampoco los magistrados de ese tribunal, Felipe de la Mata y Felipe Fuentes, ninguno de ellos acudió, a pesar de que son parte del Poder Judicial.
Claramente están ya divididos en el Poder Judicial, pues ya la discordia es total de cara a lo que vendrá el próximo año, que es ya el desmantelamiento definitivo de este Poder Judicial, tal y como lo conocemos hoy los mexicanos.
DMFC