Resumen:
Por extraño que parezca, anoche, en pleno domingo, sesionó la Comisión de Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados. El objetivo: darle trámite al engendro legislativo de la "supremacía constitucional", con el cual Morena y sus aliados pretenden hacer inatacables sus reformas.
Transcripción:
Por extraño que parezca, anoche, en pleno domingo, sesionó la Comisión de Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados. El objetivo: darle trámite al engendro legislativo de la "supremacía constitucional", con el cual Morena y sus aliados pretenden hacer inatacables sus reformas.
Si ya de por sí el uso de la palabra "supremacía" resulta peligroso en cuestiones políticas, más inquieta aún la circunstancia de que prácticamente elimina las posibilidades de que la gente común pueda defenderse de los abusos del poder.
Dentro de la iglesia católica existe el dogma de la infalibilidad del Papa, que establece que el Pontífice no comete errores en cuestiones de fe y moral. Lo que diga en ese sentido se acata y no hay discusión alguna. Algo así van a aprobar en San Lázaro, con tonos guindas.
Ya salió el peine sobre la ausencia de la priista Cynthia López Castro en la votación de la reforma sobre la supremacía constitucional en el Senado. La senadora ha insistido en que fue porque "se le bajó la presión".
Sin embargo, entre los senadores se dice que la presión en realidad fue de Morena para "Alito" Moreno, quien habría maniobrado para que la legisladora desapareciera en el momento clave y así la 4T no tuviera problemas para alcanzar los votos que necesitaba.
Si no fuera cierto que "Alito" fue quien le "bajó la presión" a López Castro, ya la habría expulsado de sus filas, porque justamente el acuerdo en la bancada era que quien facilitara la aprobación, se iba.
Como si no hubiera suficientes temas de preocupación, hoy serán las supuestas elecciones de uno de los sindicatos más poderosos y ricos del país: el petrolero.
Dado el carácter estratégico de Pemex, lo que suceda en el gremio es (o debería de ser) de primera importancia para el gobierno federal. Los más de 90 mil agremiados escogerán entre dos planillas: la Verde, que encabeza Ricardo Aldana, el dirigente que busca reelegirse como continuación de la línea de mando, corrupción y manejos oscuros que viene desde la época priista y que siguió en el gobierno de AMLO; y la planilla Guinda, de Cristina Alonso, de quien se sabe que es una trabajadora en Tabasco.
Vaya lío se armó el fin de semana en la asamblea de Morena realizada en Toluca. Ahí, frente a Luisa Alcalde y Andrés López Beltrán, las huestes mexiquenses se enfrascaron en un pleito claro.
Cuando el senador Higinio Martínez hablaba en el presidium, comenzaron a escucharse silbidos e increpaciones que no se podían ocultar. Igual le ocurrió a Ricardo Sheffield en la asamblea de Guanajuato.
Ya son varias reuniones partidistas que se desarrollan en medio de conflictos y evidencian las divisiones.
Mucho tendrán que hacer sus líderes para reconciliar a sus huestes, aunque ya se vio que lo mismo pasa en las alturas, pues los líderes parlamentarios no siempre siguen la tonada de la presidenta Claudia Sheinbaum.
F. BARTOLOMÉ