Transcripción:
Miguel Ángel López Farías
Dejaré en claro esto, estoy convencido de que Martí Batres es un personaje muyyyyy limitado, con un pasado porril tremendo, pero de ahí a ponerlo como un cerebro conspiracionista, no.
Me queda claro que el agua contaminada en la Benito Juárez no se debió a las mañas de Martí, no lo imagino ordenando ensuciar las cisternas, Martí no es suicida, pues ¿Por qué habría de darle «balas » a Santiago Taboada con ese escándalo?, hablando en plata, ¿No se le hace curioso que días antes del debate chilango, en el cual se discutiría el tema del agua, estalle en la alcaldía BJ toda una bronca por agua contaminada por -quien sabe que sustancia?
Y como soy adicto al pensar mal, llama la atención que -siguiendo la misma receta- un día antes del tercer encuentro chilango (cuyo tema fue el de la seguridad) se haya dado un supuesto ataque en contra de Alesandra Rojo de la Vega, la joven influencer que busca gobernar la alcaldía Cuauhtémoc.
Una agresión muy conveniente y que arroja gasolina a la narrativa del propio Taboada quien nada más le faltó pedir la intervención del FBI.
NO, puessss no, no les creo...estoy en mi muy neuronal derecho de sospechosear sobre lo ocurrido el sábado en la colonia Peralvillo.
Sin ánimo de ofender, diré que el mayor problema de Alesandra Rojo del Vega es tratar de ver todo desde el lente de las redes sociales, el mundo inmediato es relativo a los Tik Tok, la ecuación electoral no descansa en lo humano y sus necesidades, sino en la colección de followers.
Eso es un verdadero problema entre muchos políticos de ahora y Alesandra no es la única, tenemos el caso del gobernador de Nuevo León, Samuelito García y su señora, cómo reyes de la comarca de los likes... gobiernos de Facebook.
A ver, Alesandra ya se enredó en su historia.
El hilo narrativo dice que recibió una nota urgente por la tarde ese sábado, tras salir de una reunión en la colonia Peralvillo, la nota «parecía» ser de una mujer que vivía con violencia o sabía de alguien que era sometida a violencia, Alesandra despacho a su equipo y decidió ir a el domicilio -ella y su chofer- y es ahí en dónde recibió la agresión. Sabemos que no era la camioneta que ella usaba de manera regular, que optó por ir sola en atención a una persona que la habría citado.
¿Usted le cree?... yo tampoco .
Pero haré mi trabajo y dejaré estas preguntas: ella ha dicho que venía recibiendo amenazas en los días previos ¿Es razonable hacerle caso a una nota de «alguien» que la cita en x domicilio ya entrada la noche y hacerlo sin su equipo de colaboradores? ¿En Peralvillo?
¿Con quién realmente se iba a reunir si hacemos caso a lo que se comenta en los círculos policiacos sobre acuerdos con la maña?
Alesandra insiste en que la quieren callar, ¿Pero por qué? ¿Por qué agredir a alguien que está en segundo lugar en las preferencias electorales?
Pensar en un auto atentado es muy riesgoso, imprudente y lo único que tenemos en la mesa de análisis es la sospecha de que no fue tal y como lo dice la candidata, pero afirmar que ella o alguno de sus estrategas pudieron hacer esto, sería un acto de desquiciados... solo que en este bendito país cualquier locura es posible, sino pregúntenle a Sandra Cuevas, la reina de la telenovela mexicana.
Lo cierto es que la propia fiscalía de la CDMX tiene frente a si la enorme tarea de llevar con toda pulcritud esta investigación.
Una de las mejores herramientas es que en la zona en donde se dieron los hechos se cuenta con la instalación de decenas de cámaras, o sea, muchos ojos que servirán para saber lo que realmente ocurrió.
Tenemos algo en los datos duros: seis balas en una camioneta, pero una línea de hechos del tamaño de guion de Netflix...y la vocación de una influencer por hacerse notar a como dé lugar.
Si no, que pregunten a quienes trabajaron con ella en la Miguel Hidalgo...tiempos de pasión y de muchas mentiras.