IECM destruirá material electoral de 2024: un adiós a la memoria


Resumen:

El IECM, guardián de la democracia capitalina, se prepara para dar un último adiós a la memoria electoral del 2024. ¿Cómo? Destruyendo todo el material utilizado en las últimas elecciones, desde las boletas de la elección a la Jefatura de Gobierno hasta los votos nulos de la consulta de Presupuesto Participativo.

Transcripción:

El IECM, guardián de la democracia capitalina, se prepara para dar un último adiós a la memoria electoral del 2024. ¿Cómo? Destruyendo todo el material utilizado en las últimas elecciones, desde las boletas de la elección a la Jefatura de Gobierno hasta los votos nulos de la consulta de Presupuesto Participativo.

El proceso de destrucción, según el acuerdo IECM/ACU-CG-145/2024, se llevará a cabo mediante la trituración simple, un método que busca no solo eliminar la información sensible, sino también convertir los residuos en materiales reciclables.


El IECM no solo se enfoca en la eliminación segura de la documentación, sino también en la responsabilidad ambiental. La empresa que se encargue de la destrucción deberá cumplir con las normas ambientales y presentar un documento que avale el reciclaje de los productos generados.

La información susceptible de destrucción incluye no solo las boletas de las elecciones regulares, sino también las boletas de las personas en prisión preventiva, el voto anticipado de personas en estado de postración, y hasta la documentación del voto de los mexicanos residentes en el extranjero.

Las bolsas con votos nulos, sin embargo, no tendrán el mismo destino. Se reservarán para la DEOEyG (Dirección Ejecutiva de Organización Electoral y Geoestadística), quienes las utilizarán para elaborar estudios e informes sobre el voto nulo en el Proceso Electoral Local Ordinario 2023-2024.

El AME (Almacén de Materiales Electorales) servirá como centro de acopio para toda la documentación electoral, antes de ser trasladada a la planta de destrucción.

La primera quincena de diciembre será testigo de este proceso final, con un acta oficial que documentará la destrucción, y un informe final que resuma la labor realizada.