El Instituto Electoral de la Ciudad de México ahorra millones reutilizando los materiales electorales


Resumen:

El Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM) logró un ahorro significativo durante las elecciones del 2 de junio al reutilizar aproximadamente el 90% de los materiales electorales. Esta práctica permitió ahorrar más de 166 millones de pesos, evitando la producción de nuevos materiales y reduciendo la generación de residuos plásticos y metálicos. En total, se distribuyeron más de 200 mil materiales en los 33 Distritos Electorales, de los cuales 183,088 ya habían sido utilizados en elecciones anteriores y fueron rehabilitados para el Proceso Electoral Local Ordinario 2023-2024.

Transcripción:

El Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM) logró un ahorro significativo durante las elecciones del 2 de junio al reutilizar aproximadamente el 90% de los materiales electorales. Esta práctica permitió ahorrar más de 166 millones de pesos, evitando la producción de nuevos materiales y reduciendo la generación de residuos plásticos y metálicos. En total, se distribuyeron más de 200 mil materiales en los 33 Distritos Electorales, de los cuales 183,088 ya habían sido utilizados en elecciones anteriores y fueron rehabilitados para el Proceso Electoral Local Ordinario 2023-2024.

El ahorro logrado es considerable, ya que la producción de nuevos materiales habría costado 182 millones 972 mil 600 pesos, mientras que la rehabilitación solo costó 16 millones 858 mil 941 pesos. El IECM lleva a cabo anualmente la rehabilitación de diversos materiales como mamparas, urnas y crayones, los cuales son revisados y rehabilitados en el Almacén de Materiales Electorales (AME) del IECM. Esta práctica no solo contribuye a la eficiencia del gasto público, sino que también cumple con la normativa ambiental de la Ciudad de México, reduciendo la generación de residuos difíciles de reciclar.

Además del ahorro económico, la reutilización de materiales electorales por parte del IECM contribuye a la sostenibilidad y protección del medio ambiente. Los materiales serán clasificados y rehabilitados nuevamente para su uso en futuras consultas, como la del Presupuesto Participativo del próximo año. Esta iniciativa podría servir de ejemplo para otras instituciones en el país, demostrando que la sostenibilidad y la eficiencia económica pueden ir de la mano.