Quieren robarse elección de la Cuauhtémoc.- Alessandra Rojo de la Vega
Resumen:
La alcaldesa electa de la Cuauhtémoc, Alessandra Rojo de la Vega, denunció desde las instalaciones del Instituto Nacional Electoral (INE) que la familia Monreal "quiere robarse la elección" a través de sus "compadrazgos" en el Tribunal Electoral de la CDMX, pues preparan un nuevo intento para deslegitimar su victoria en la demarcación con el argumento de una presunta violencia política de género en contra de su contrincante, la morenista Caty Monreal.
Transcripción:
La alcaldesa electa de la Cuauhtémoc, Alessandra Rojo de la Vega, denunció desde las instalaciones del Instituto Nacional Electoral (INE) que la familia Monreal "quiere robarse la elección" a través de sus "compadrazgos" en el Tribunal Electoral de la CDMX, pues preparan un nuevo intento para deslegitimar su victoria en la demarcación con el argumento de una presunta violencia política de género en contra de su contrincante, la morenista Caty Monreal.
"Al día de hoy han habido cuatro vías de ataque, de esas cuatro vías de ataque, solo les quedan dos, y su viabilidad es nula, no existen los supuestos para que lo acrediten, yo no ejercí violencia política en su contra, y no hay un solo elemento para que anulen la elección", indicó en conferencia de prensa.
Rojo de la Vega puntualizó que las cuatro quejas que ha interpuesto Monreal por violencia política de género "no tienen congruencia" ni fundamentos y que incluso el Instituto Electoral ya había desechado estas denuncias en una sesión en julio pasado al considerar que "esto era parte del debate político y de la libertad de expresión".
Indicó que la primera queja fue por considerar que ella era parte de su familia, es decir de los Monreal y "esa que lleva años abusando de su poder" en la alcaldía; la segunda fue porque la llamó por su apellido paterno durante el debate y las últimas dos por supuestas pancartas donde se menciona su apellido, por hablar de la injerencia del gobierno de Zacatecas y por decir que su papá gobernó la Cuauhtémoc y que "saqueó a la demarcación".
"Desde que ganamos la elección en la Cuauhtémoc, el 2 de junio, la candidata derrotada empezó a tener gran interés en las autoridades electorales y se los digo porque su equipo legal, hasta un día antes de la elección, sólo había interpuesto 14 quejas", comentó.
La alcaldesa electa recordó que en dos ocasiones su contrincante ha solicitado el recuento total de votos, pero enfatizó que hay favores que el magistrado presidente del Tribunal Electoral capitalino Armando Ambriz y su "cómplice", Osiris Vázquez, le deben al senador Ricardo Monreal, por lo que obligan a la autoridad a buscar nuevamente echar abajo la elección y apuntan a tirar su triunfo utilizando como último recurso la acusación de violencia política de género.
"Lo digo fuerte y claro: el Tribunal Electoral de la Ciudad de México por medio de su presidente, el magistrado Armando Ambriz y su cómplice, Osiris Vázquez, van a intentar anular la elección acreditando violencia política de género que es el último recurso que les queda para poderse robar a la mala, lo que no ganaron por la buena", indicó.
Sentenció que los Monreal están distorsionando la figura de violencia política de género, un mecanismo que fue creado "para proteger a las mujeres, no para justificar una derrota que no pueden aceptar".
Insistió que quien cometió la violencia política de género fue Caty Monreal, contra quien de hecho ya se emitieron medidas cautelares para que no lance calificativos y sobrenombres a su adversaria, como decirle "Alefarsa" y que durante la campaña también sufrió del retiro de su propaganda, violencia mediática y hasta miedo por su integridad y la de su familia.
"Vivimos una campaña sumamente violenta, desde el retiro diario de nuestra propaganda, violencia política de género, violencia mediática denigrando mi imagen con dichos sexuales, con estereotipos. En momentos, teniendo miedo por mi vida y la integridad de mi familia, porque hasta con ellos se metieron", confesó.
Rojo de la Vega recordó que a lo largo de la campaña, ella y su equipo han interpuesto 170 quejas ante el INE contra Caty, de las cuales 80 se presentaron el día de la elección el pasado 2 de junio, por actos de violencia e irregularidades atribuidas a la abanderada de la 4T, quien solo ha presentando 18 quejas.
"El día de la elección las irregularidades que ellos mencionan el 2 de junio, fueron dos, nosotros ese día metimos 80 denuncias más, también pedimos apoyo a la secretaría de Seguridad Ciudadana, para que se llevará a dos personas que estaban comprando votos, mismos que fueron trasladados al Ministerio Público", indicó.
La alcaldesa electa recordó que el Tribunal Electoral local deberá sesionar antes del 30 de agosto para definir el rumbo de la elección.
"Va a sesionar y yo les podría apostar a que van a anular la elección", sostuvo.
También pidió que se respete la democracia y decisión de los ciudadanos de la Cuauhtémoc, quienes, aseguró, votaron por ella por ser una candidata preocupada por mejorar a la alcaldía y por el hartazgo que sentían por los años de gobierno de los Monreal y su abuso de poder.
"Lo estoy advirtiendo (la anulación de la elección), para cumplirles el capricho a sus amigos abusivos, estos que no saben reconocer que la gente ya no los quiere en la Cuauhtémoc", comentó.
Puntualizó que los Monreal nunca vieron venir qué ella podía ganar pues pensaron que con la fuerza que tenían en la CDMX y por su abuso de poder podrían venderla, pero como no lo consiguieron ahora buscan arrebatarle su victoria.
"Jamás se imaginaron que les podíamos ganar, ¿Cómo íbamos a poder nosotros contra toda la fuerza del estado y contra ese abuso de poder? Y como no saben perder, ahora quieren arrebatar", aseveró.
Pese a estas insistencias de arrebatarle su triunfo en la Cuauhtémoc, dijo que eso no lo va a permitir, pues ganaron legítimamente en las urnas y que más que pelear un cargo, la lucha es por la defensa de la democracia y la libertad ciudadana para decidir a sus representantes.
"No permitiré que nos arrebaten lo que hemos ganado legítimamente en las urnas (...) No peleo por un cargo, un presupuesto, por ser alcaldesa. Estoy dando la lucha porque lo que está en juego son las libertades más básicas de las y los ciudadanos en una democracia", agregó.
Por lo anterior, la alcaldesa electa de Cuauhtémoc convocó a una concentración el domingo 18 de agosto, en la Diana Cazadora, a las 10:00 horas, para exigir que se respeten los resultados en la demarcación.
Al finalizar la conferencia, reveló que su abogado le informó que Caty Monreal tenía una queja que se le acreditó por violencia política de género y que le dictaron medidas cautelares, por lo que ahora sería al revés y ella podría estar en la mira por este delito.
"Al día de hoy han habido cuatro vías de ataque, de esas cuatro vías de ataque, solo les quedan dos, y su viabilidad es nula, no existen los supuestos para que lo acrediten, yo no ejercí violencia política en su contra, y no hay un solo elemento para que anulen la elección", indicó en conferencia de prensa.
Rojo de la Vega puntualizó que las cuatro quejas que ha interpuesto Monreal por violencia política de género "no tienen congruencia" ni fundamentos y que incluso el Instituto Electoral ya había desechado estas denuncias en una sesión en julio pasado al considerar que "esto era parte del debate político y de la libertad de expresión".
Indicó que la primera queja fue por considerar que ella era parte de su familia, es decir de los Monreal y "esa que lleva años abusando de su poder" en la alcaldía; la segunda fue porque la llamó por su apellido paterno durante el debate y las últimas dos por supuestas pancartas donde se menciona su apellido, por hablar de la injerencia del gobierno de Zacatecas y por decir que su papá gobernó la Cuauhtémoc y que "saqueó a la demarcación".
"Desde que ganamos la elección en la Cuauhtémoc, el 2 de junio, la candidata derrotada empezó a tener gran interés en las autoridades electorales y se los digo porque su equipo legal, hasta un día antes de la elección, sólo había interpuesto 14 quejas", comentó.
La alcaldesa electa recordó que en dos ocasiones su contrincante ha solicitado el recuento total de votos, pero enfatizó que hay favores que el magistrado presidente del Tribunal Electoral capitalino Armando Ambriz y su "cómplice", Osiris Vázquez, le deben al senador Ricardo Monreal, por lo que obligan a la autoridad a buscar nuevamente echar abajo la elección y apuntan a tirar su triunfo utilizando como último recurso la acusación de violencia política de género.
"Lo digo fuerte y claro: el Tribunal Electoral de la Ciudad de México por medio de su presidente, el magistrado Armando Ambriz y su cómplice, Osiris Vázquez, van a intentar anular la elección acreditando violencia política de género que es el último recurso que les queda para poderse robar a la mala, lo que no ganaron por la buena", indicó.
Sentenció que los Monreal están distorsionando la figura de violencia política de género, un mecanismo que fue creado "para proteger a las mujeres, no para justificar una derrota que no pueden aceptar".
Insistió que quien cometió la violencia política de género fue Caty Monreal, contra quien de hecho ya se emitieron medidas cautelares para que no lance calificativos y sobrenombres a su adversaria, como decirle "Alefarsa" y que durante la campaña también sufrió del retiro de su propaganda, violencia mediática y hasta miedo por su integridad y la de su familia.
"Vivimos una campaña sumamente violenta, desde el retiro diario de nuestra propaganda, violencia política de género, violencia mediática denigrando mi imagen con dichos sexuales, con estereotipos. En momentos, teniendo miedo por mi vida y la integridad de mi familia, porque hasta con ellos se metieron", confesó.
Rojo de la Vega recordó que a lo largo de la campaña, ella y su equipo han interpuesto 170 quejas ante el INE contra Caty, de las cuales 80 se presentaron el día de la elección el pasado 2 de junio, por actos de violencia e irregularidades atribuidas a la abanderada de la 4T, quien solo ha presentando 18 quejas.
"El día de la elección las irregularidades que ellos mencionan el 2 de junio, fueron dos, nosotros ese día metimos 80 denuncias más, también pedimos apoyo a la secretaría de Seguridad Ciudadana, para que se llevará a dos personas que estaban comprando votos, mismos que fueron trasladados al Ministerio Público", indicó.
La alcaldesa electa recordó que el Tribunal Electoral local deberá sesionar antes del 30 de agosto para definir el rumbo de la elección.
"Va a sesionar y yo les podría apostar a que van a anular la elección", sostuvo.
También pidió que se respete la democracia y decisión de los ciudadanos de la Cuauhtémoc, quienes, aseguró, votaron por ella por ser una candidata preocupada por mejorar a la alcaldía y por el hartazgo que sentían por los años de gobierno de los Monreal y su abuso de poder.
"Lo estoy advirtiendo (la anulación de la elección), para cumplirles el capricho a sus amigos abusivos, estos que no saben reconocer que la gente ya no los quiere en la Cuauhtémoc", comentó.
Puntualizó que los Monreal nunca vieron venir qué ella podía ganar pues pensaron que con la fuerza que tenían en la CDMX y por su abuso de poder podrían venderla, pero como no lo consiguieron ahora buscan arrebatarle su victoria.
"Jamás se imaginaron que les podíamos ganar, ¿Cómo íbamos a poder nosotros contra toda la fuerza del estado y contra ese abuso de poder? Y como no saben perder, ahora quieren arrebatar", aseveró.
Pese a estas insistencias de arrebatarle su triunfo en la Cuauhtémoc, dijo que eso no lo va a permitir, pues ganaron legítimamente en las urnas y que más que pelear un cargo, la lucha es por la defensa de la democracia y la libertad ciudadana para decidir a sus representantes.
"No permitiré que nos arrebaten lo que hemos ganado legítimamente en las urnas (...) No peleo por un cargo, un presupuesto, por ser alcaldesa. Estoy dando la lucha porque lo que está en juego son las libertades más básicas de las y los ciudadanos en una democracia", agregó.
Por lo anterior, la alcaldesa electa de Cuauhtémoc convocó a una concentración el domingo 18 de agosto, en la Diana Cazadora, a las 10:00 horas, para exigir que se respeten los resultados en la demarcación.
Al finalizar la conferencia, reveló que su abogado le informó que Caty Monreal tenía una queja que se le acreditó por violencia política de género y que le dictaron medidas cautelares, por lo que ahora sería al revés y ella podría estar en la mira por este delito.