Resumen:
Los agresores del comisario jefe Milton Morales Figueroa, coordinador general de la Unidad de Estrategia Operaciones Especiales de la Secretaría de Seguridad Ciudadana realizaron un seguimiento previo los movimientos del mando policial, así como de su entorno, lo que les permitió perpetrar el ataque directo el domingo pasado en Coacalco
Transcripción:
Los agresores del comisario jefe Milton Morales Figueroa, coordinador general de la Unidad de Estrategia Operaciones Especiales de la Secretaría de Seguridad Ciudadana realizaron un seguimiento previo los movimientos del mando policial, así como de su entorno, lo que les permitió perpetrar el ataque directo el domingo pasado en Coacalco
De acuerdo con fuentes judiciales y las primeras indagatorias del caso, dos vehículos un Aveo color blanco y un Versa gris dieron seguimiento al mando policial desde la mañana del domingo y una vez que observaron que detuvo su marcha en una pollería, sobre la calle Agua, organizaron el ataque sin que pudieran identificarlos, pues sabían que no llevaba consigo el cuerpo de seguridad asignado.
A las 11:35 horas, un hombre bajó de una de las unidades y se acercó a escasos centímetros de Morales para dispararle en reiteradas ocasiones y quitarle la vida. Luego huyó hacia donde se encontraban los vehículos que lo trasladaban y que hicieron la función de muro durante todo el seguimiento.
El modus operandi corresponde al utilizado por sicarios en el Valle de México que EL UNIVERSAL dio a conocer el 16 de julio.
Agresores estudiaron entorno para asesinar a mando policiaco
Los agresores del comisario jefe Milton Morales Figueroa, coordinador General de la Unidad de Estrategia y Operaciones Especiales de la Secretaría de Seguridad (SSC), hicieron un seguimiento previo de los movimientos del mando policial, así como de su entorno, lo que les permitió realizar el ataque directo el domingo pasado en el municipio de Coacalco, Estado de México, según revelaron fuentes policiales.
Dos vehículos, un Aveo color blanco y un Versa gris, dieron seguimiento al mando policial desde la mañana del domingo, y una vez que observaron que detuvo su marcha en una pollería con razón social César, sobre la calle Agua, hicieron lo mismo sin que pudieran ser identificados, pues sabían que no lo acompañaba el cuerpo de seguridad asignado.
Un sujeto bajó de una de las unidades y se perfiló a escasos centímetros de Morales, para disparar en reiteradas ocasiones en su contra y quitarle la vida a las 11:35 horas, según el reporte policiaco.
Luego huyó en dirección a donde se encontraban los vehículos que lo trasladaban, y que hicieron la función de muro durante todo el seguimiento.
De acuerdo con información consultada por este diario, las primeras indagatorias arrojan que los sicarios conocían su entorno familiar y social, lo que les permitió saber sobre su zona de influencia en el municipio de Coacalco.
Se investiga, incluso, la periodicidad del seguimiento que realizaron en contra del que fuera uno de los principales artífices de la estrategia de seguridad en la Ciudad. El crimen se cometió a 1.6 kilómetros de donde su cuñada refirió se dirigían, a la calle Niños Héroes. Antes se detuvieron a comprar pollo, momento que usaron para asesinarlo.
Las fuentes consultadas refirieron que hasta el momento se cuenta con análisis de las cámaras de seguridad, seguimiento a los dos vehículos en los que presuntamente viajaban los agresores, así como el paso que hicieron por casetas de peaje para poder escapar.
Hasta el momento, indicaron, no hay un móvil fijo ni organización criminal a la que se le pueda atribuir el asesinato, pero no se descarta ninguna línea de investigación.
Para la investigación se desplegaron varias células de agentes no sólo del Estado de México, sino del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), la Comisión para la Atención del Delito de Homicidio de la SSPC, y células de inteligencia que lideraba el mismo mando de la SSC capitalina.
Milton Morales acababa de arribar a la capital luego de cumplir con un curso en la India que empezó el 24 de junio y concluyó el 5 de julio pasado, por lo que se indaga que los agresores esperaron a que regresara para cometer el crimen.
El mando se encontraba franco, y según contó el jefe de la policía capitalina, Pablo Vázquez, en una entrevista con el periodista Ciro Gómez Leyva, estaba por concluir un periodo vacacional.
Incluso refirió que se investiga de manera interna por qué los escoltas que lo cuidaban no se encontraban acompañándolo este domingo.
El modus operandi utilizado por los agresores y el gatillero que disparó en más de dos ocasiones en contra del coordinador general de la Unidad de Estrategia y Operaciones Especiales, corresponde al utilizado en el Valle de México y que EL UNIVERSAL dio a conocer en su edición del pasado 16 de julio.
Los sicarios trabajan como una empresa de seguridad. Hay unos que contactan a los gatilleros, otros son los que vigilan y otro grupo es el que huye, generalmente, en motocicletas. Sin embargo, en el crimen del mando policial se emplearon dos vehículos.