Política para Guapos // El gabinete de Brugada: entre herencias, compromisos y apuestas
Resumen:
POLÍTICA PARA GUAPOS El gabinete de Brugada: entre herencias, compromisos y apuestas Por Alberto Tavira 24.
Transcripción:
POLÍTICA PARA GUAPOS El gabinete de Brugada: entre herencias, compromisos y apuestas Por Alberto Tavira 24
POLÍTICA PARA GUAPOS
EL GABINETE DE CLARA BRUGADA: ENTRE HERENCIAS, COMPROMISOS Y APUESTAS
POR ALBERTO TAVIRA TWITTER: @BETOTAVIRA
ligió un lugar histórico para la anunciación de su gabinete. Con su silueta enmarcada por el mural "La Creación" -que Diego Rivera pintó en 1922 en el Anfiteatro Simón Bolívar del Colegio de San Idelfonso- la jefa de Gobierno electa de la Ciudad de México, Clara Marina Brugada Molina, el pasado 19 de agosto dio a conocer a las y los funcionarios que la acompañarán durante su gobierno.
11 mujeres y 10 hombres fueron ungidos por la próxima gobernante de la CDMX...
bueno, bueno... Eso de que ella decidió ungir a todos y a cada uno ha levantado las cejas de microblading de las integrantes de mi CISEN (Comadres que Investigan Sobre la Élite Nacional) para quienes algunos nombres y apellidos suenan más a compromiso que a experiencia y, otros, se leen como que fueron heredados y no seleccionados.
Desde luego que en el gabinete de Clara Brugada también hay perfiles conocidos, otros poco mediáticos que pueden dar buenas sorpresas (o no) y uno que otro que, desde la opinión de mi gremio de los guapos, ya deberían de darle oportunidad a las nuevas generaciones de administradores públicos.
Por ejemplo Alejandro Encinas Rodríguez, próximo titular de la Secretaría de Planeación y Ordenamiento Territorial, debería de ser asesor externo (que conste que no tengo nada en contra de Santa Claus y de la Navidad). Y es que desde que yo iba en la primaria en los años 80 del siglo pasado, Encinas ya ocupaba cargos de elección popular. Aclaro que nadie le está regateando su experiencia e incluso algunos aciertos, pero el que haya pasado por todas las coordenadas políticas no representa una obligación vitalicia.
En el caso de Alejandra Frausto Guerrero se notó que es parte de la herencia que le deja el presidente Andrés Manuel López Obrador a Clara Brugada. La todavía secretaria de Cultura federal será la próxima secretaria de Turismo local y, nuevamente, se arquearon las cejas de mi CISEN.
Para nadie es un secreto que el escaso presupuesto para Cultura no le dio a Frausto margen de maniobra inclusivo y justo, por lo tanto, cerrará su ciclo en esa dependencia con poco reconocimiento de todos los gremios culturales.
Otra herencia -al parecer afortunada- es la de Pablo Vázquez Camacho. El secretario de Seguridad Ciudadana, que repetirá en la misma ciudad y con la misma gente, es parte del equipo de confianza de Omar García Harfuch, contrincante de Clara Brugada en la elección interna de Morena por la CDMX, por lo tanto su refrendo se antoja más como una instrucción de la presidenta electa Claudia Sheinbaum que a la simpatía que pudiera tener por él Clarita.
Ahora bien. Todo parece indicar que en el Brugadarismo sí se le dará un peso importante a la Cultura. Y para eso fue nombrada como secretaria Ana Francis Mor -que en realidad se llama Ana Francis López Bayghen Patiño-, a quien tengo el gusto de conocer de cerca desde hace por lo menos una década. Ese perfil cultural nos gusta a los guapos, sobre todo a los de la comunidad del arcoíris, porque es una mujer que proviene de la clase media, desde el terreno del amor convive con altas esferas sociales sin alejarse del humanismo y, seguramente, comprenderá que el espectro cultural abarca más allá de tres cuadras, ocho topes y 20 perros.
De Manola Zabalza Aldama, quien será la mera mera en la Secretaría de Desarrollo Económico, sólo he escuchado cosas buenas. Todavía no tengo el placer de echar chisme en corto con ella, pero un segmento de los empresarios chilangos la ven con buenos ojos.
No puedo decir lo mismo de César Cravioto Romero, próximo secretario de Gobierno. La mala fama, entre los que saben de política, lo persigue.
Juan Pablo De Botton Falcón, el siguiente secretario de Administración y Finanzas tiene más curriculum que pedigree político.
Y eso se agradece en un país donde todavía imperan las dinastías del poder.
A Inti Munoz Santini, el nuevo secretario de Vivienda, además de que fue de los más aplaudidos en la anunciación de San lldefonso, también lo aplaude mi CISEN. "Ése si conoce la Ciudad desde las tripas", me dicen. Y es resolvedor. veamos.
Me comienza a escasear el espacio en esta columna de Política para guapos -como el agua en la Ciudad de México- así que antes de concluir seré honesto: prácticamente a la tercera parte del gabinete de Clara Brugada no los conocía. Por lo tanto los pondré en el rango de los poco mediáticos que pueden dar buenas sorpresas... o no.
Más allá de lo taquillero de sus nombres o de los compromisos adquiridos en campaña, el gabinete de Clara Brugada debe hacer conciencia de que llega a una ciudad dividida prácticamente a la mitad entre los simpatizantes de Morena y sus detractores.
Es decir, de su trabajo en esta administración dependerá en gran medida hacia dónde se carga la balanza en las elecciones de 2030. Y si convierten a su jefa en presidenciable.
El gabinete de Clara no debe pecar de soberbio y confiarse de que la marca López Obrador los rescatará. En seis años México será otro país. Y también será otra la Ciudad de México.
Por ejemplo, Alejandro Encinas Rodríguez, próximo titular de la Secretaría de Planeación y Ordenamiento Territorial, debería de ser asesor externo (que conste que no tengo nada en contra de Santa Claus y de la Navidad). Y es que desde que yo iba en la primaria en los años 80 del siglo pasado, Encinas ya ocupaba cargos de elección popular
CLARA BRUGADA JEFA.DE GOBIERNO Foto: Cuartoscuro
POLÍTICA PARA GUAPOS
EL GABINETE DE CLARA BRUGADA: ENTRE HERENCIAS, COMPROMISOS Y APUESTAS
POR ALBERTO TAVIRA TWITTER: @BETOTAVIRA
ligió un lugar histórico para la anunciación de su gabinete. Con su silueta enmarcada por el mural "La Creación" -que Diego Rivera pintó en 1922 en el Anfiteatro Simón Bolívar del Colegio de San Idelfonso- la jefa de Gobierno electa de la Ciudad de México, Clara Marina Brugada Molina, el pasado 19 de agosto dio a conocer a las y los funcionarios que la acompañarán durante su gobierno.
11 mujeres y 10 hombres fueron ungidos por la próxima gobernante de la CDMX...
bueno, bueno... Eso de que ella decidió ungir a todos y a cada uno ha levantado las cejas de microblading de las integrantes de mi CISEN (Comadres que Investigan Sobre la Élite Nacional) para quienes algunos nombres y apellidos suenan más a compromiso que a experiencia y, otros, se leen como que fueron heredados y no seleccionados.
Desde luego que en el gabinete de Clara Brugada también hay perfiles conocidos, otros poco mediáticos que pueden dar buenas sorpresas (o no) y uno que otro que, desde la opinión de mi gremio de los guapos, ya deberían de darle oportunidad a las nuevas generaciones de administradores públicos.
Por ejemplo Alejandro Encinas Rodríguez, próximo titular de la Secretaría de Planeación y Ordenamiento Territorial, debería de ser asesor externo (que conste que no tengo nada en contra de Santa Claus y de la Navidad). Y es que desde que yo iba en la primaria en los años 80 del siglo pasado, Encinas ya ocupaba cargos de elección popular. Aclaro que nadie le está regateando su experiencia e incluso algunos aciertos, pero el que haya pasado por todas las coordenadas políticas no representa una obligación vitalicia.
En el caso de Alejandra Frausto Guerrero se notó que es parte de la herencia que le deja el presidente Andrés Manuel López Obrador a Clara Brugada. La todavía secretaria de Cultura federal será la próxima secretaria de Turismo local y, nuevamente, se arquearon las cejas de mi CISEN.
Para nadie es un secreto que el escaso presupuesto para Cultura no le dio a Frausto margen de maniobra inclusivo y justo, por lo tanto, cerrará su ciclo en esa dependencia con poco reconocimiento de todos los gremios culturales.
Otra herencia -al parecer afortunada- es la de Pablo Vázquez Camacho. El secretario de Seguridad Ciudadana, que repetirá en la misma ciudad y con la misma gente, es parte del equipo de confianza de Omar García Harfuch, contrincante de Clara Brugada en la elección interna de Morena por la CDMX, por lo tanto su refrendo se antoja más como una instrucción de la presidenta electa Claudia Sheinbaum que a la simpatía que pudiera tener por él Clarita.
Ahora bien. Todo parece indicar que en el Brugadarismo sí se le dará un peso importante a la Cultura. Y para eso fue nombrada como secretaria Ana Francis Mor -que en realidad se llama Ana Francis López Bayghen Patiño-, a quien tengo el gusto de conocer de cerca desde hace por lo menos una década. Ese perfil cultural nos gusta a los guapos, sobre todo a los de la comunidad del arcoíris, porque es una mujer que proviene de la clase media, desde el terreno del amor convive con altas esferas sociales sin alejarse del humanismo y, seguramente, comprenderá que el espectro cultural abarca más allá de tres cuadras, ocho topes y 20 perros.
De Manola Zabalza Aldama, quien será la mera mera en la Secretaría de Desarrollo Económico, sólo he escuchado cosas buenas. Todavía no tengo el placer de echar chisme en corto con ella, pero un segmento de los empresarios chilangos la ven con buenos ojos.
No puedo decir lo mismo de César Cravioto Romero, próximo secretario de Gobierno. La mala fama, entre los que saben de política, lo persigue.
Juan Pablo De Botton Falcón, el siguiente secretario de Administración y Finanzas tiene más curriculum que pedigree político.
Y eso se agradece en un país donde todavía imperan las dinastías del poder.
A Inti Munoz Santini, el nuevo secretario de Vivienda, además de que fue de los más aplaudidos en la anunciación de San lldefonso, también lo aplaude mi CISEN. "Ése si conoce la Ciudad desde las tripas", me dicen. Y es resolvedor. veamos.
Me comienza a escasear el espacio en esta columna de Política para guapos -como el agua en la Ciudad de México- así que antes de concluir seré honesto: prácticamente a la tercera parte del gabinete de Clara Brugada no los conocía. Por lo tanto los pondré en el rango de los poco mediáticos que pueden dar buenas sorpresas... o no.
Más allá de lo taquillero de sus nombres o de los compromisos adquiridos en campaña, el gabinete de Clara Brugada debe hacer conciencia de que llega a una ciudad dividida prácticamente a la mitad entre los simpatizantes de Morena y sus detractores.
Es decir, de su trabajo en esta administración dependerá en gran medida hacia dónde se carga la balanza en las elecciones de 2030. Y si convierten a su jefa en presidenciable.
El gabinete de Clara no debe pecar de soberbio y confiarse de que la marca López Obrador los rescatará. En seis años México será otro país. Y también será otra la Ciudad de México.
Por ejemplo, Alejandro Encinas Rodríguez, próximo titular de la Secretaría de Planeación y Ordenamiento Territorial, debería de ser asesor externo (que conste que no tengo nada en contra de Santa Claus y de la Navidad). Y es que desde que yo iba en la primaria en los años 80 del siglo pasado, Encinas ya ocupaba cargos de elección popular
CLARA BRUGADA JEFA.DE GOBIERNO Foto: Cuartoscuro