Transcripción:
La gran plaza comercial "México Mart". de Izazaga 89, en la que se comercializaban productos provenientes de China, fue cerrada y clausurada por el Instituto de Verificación Administrativa (Invea) del Gobierno capitalino.
En la acción participaron 36 servidores públicos del Invea, especializados en Funciones de Verificación, 95 oficiales de la Secretaría de Seguridad de la CDMX y representantes de las secretarías de Gobierno, de Desarrollo Urbano, de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil. además de la Autoridad del Centro Histórico.
"Este 11 de julio, el Instituto de Verificación clausuró un inmueble en la Alcaldía Cuauhtémoc, donde se comercializaban diversos productos, debido que no contaban con la documentación correspondiente para acreditar los trabajos que ahí se realizan", indicó el Invea en una comunicación pública.
El Jefe de Gobierno, Martí Batres, tuiteó que la medida contra el centro comercial fue "por violar disposiciones legales" que no precisó.
El complejo comercial es una de las cuatro macroplazas que, después de la pandemia, se instalaron en un área de un kilómetro cuadrado para dominar el comercio del Centro Histórico, con productos importados, pero cuya venta era cuestionada por comerciantes formales, pues consideraban que evadía impuestos.
Grupo REFORMA documentó el modus operandi de los comerciantes asiáticos que controlan no sólo la importación de mercancías sino su distribución, transporte y venta con evasiones legales.
La plaza clausurada ayer consta de 16 pisos repletos de tiendas. La mayoría de los empleados son migrantes centroamericanos o sudamericanos y los administradores son de origen chino.
Cada día, cientos de toneladas de mercancía eran ingresadas por la calle Nezahualcóyotl 120, por "diableros" que acarreaban cajas de tráileres que se estacionan en la Colonia Obrera.
Junto con las 4 megaplazas, al menos 13 calles del Primer Cuadro suman 17 edificios y cientos de negocios que ahora han sido convertidos en bodegas y lugares para venta de artículos chinos que entran al país masivamente.
El 18 de junio, el Gobierno capitalino admitió las afectaciones por el crecimiento de este negocio que opera en la informalidad.
Para trabajadores de la plaza el cierre del inmueble no fue una sorpresa, pues reconocen que ninguno de los comercios cuenta con documentación que avale su funcionamiento.
IZAZAGA 89 SIN PERMISOS
Para los comerciantes trabajadores de la Plaza de Izazaga 89, la clausura que se llevó a cabo ayer, tras verificarse que el inmueble carecía de permisos para operar, no fue ninguna sorpresa.
En junio, REFORMA publicó que el complejo comercial era una de las cuatro macroplazas que, después de la pandemia, se instalaron en un área de un kilómetro cuadrado para dominar el comercio del Centro Histórico.
Al menos 13 calles del Primer Cuadro suman 17 edificios y cientos de negocios que, poco a poco, fueron convertidos en bodegas y plazas para venta de artículos chinos que entran al País masivamente, aprovechando vacíos legales.
Ayer, las autoridades capitalinas, encabezadas por el Instituto de Verificación Administrativa (Invea), arribaron al inmueble de 16 pisos, con 40 locales en cada uno, alrededor de las 12:30 horas, con la intención de revisar el inmueble.
Tras esta fue realizado el cierre Los accesos quedaron bloqueados y tapizados con los sellos de clausura "(La clausura se realizó) debido que no cuentan con la documentación correspondiente para acreditar los trabajos que realizan". detalló el Invea en un comunicado.
"Dicha diligencia se ejecutó alrededor de las 12:30 horas. con la participación de 36 personas servidoras públicas del Personal Especializado en Funciones de Verificación del Invea 95 elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, así como con el apoyo de las Secretarías de Gobierno, de Desarrollo Urbano Vivienda y de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil. además de la Autoridad del Centro Histórico" El operativo obligó que los comerciantes de la plaza tuvieran que salir a la calle.
Únicamente algunos trabajadores de seguridad permanecieron adentro, según informó uno de los trabajadores.
Empleados reconocen que ninguno de los comercios cuenta con documentación que avale su funcionamiento.
"El 80 por ciento de los locatarios no tienen papeles, tienen que cerrar siempre que viene Hacienda La plaza se vuelve casi casi como si hubiera un saqueo", afirmó Raúl. quien trabaja como "diablero" en el lugar.
Tras el operativo de las autoridades. las calles aledañas estaban llenas de "diableros" y las entradas de clientes que miraban con decepción la clausura.
"Veníamos a comprar cositas de papelería 'kawaii', somos tianguistas, ya revendemos todo lo de aquí de las plazas chinas en el tianguis. Nosotros venimos de Neza. Nos gusta por los precios, aunque sean chinos, los precios y, también, porque hay varios artículos que son los de novedad (es lo que más venden)", afirmó Guadalupe Aguilar, compradora en plaza En el lugar, se ofertan más de 10 mil tipos de productos.
Los artículos se venden al mayoreo. en efectivo y sin factura o comprobante de por medio Algunos de los clientes optaron por avanzar a una de las otras tres plazas que se ubican sobre Izazaga y las cuales mantuvieron su operación regular.
El 18 de junio, el Gobierno capitalino reconoció las afectaciones por el crecimiento de estos negocios que operan en la informalidad y aseguró que se realizaría un diagnóstico para evaluar sus dimensiones.
Ayer, el Jefe de Gobierno, Martí Batres, aseguró, a través de su cuenta de X. que el inmueble violaba diversas disposiciones, aunque sin dar mayores detalles.