Resumen:
El obispo emérito de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, quien fue reportado como desaparecido el 27 de abril y días después fue encontrado en un hospital, decidió no interponer ninguna denuncia contra las personas que le hicieron daño.
Transcripción:
El obispo emérito de la Diócesis Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, quien fue reportado como desaparecido el 27 de abril y días después fue encontrado en un hospital, decidió no interponer ninguna denuncia contra las personas que le hicieron daño.
A través de una carta, Rangel Mendoza concluyó que por su edad y salud desfavorables, así como por "los principios evangélicos de nuestro Señor Jesucristo" perdona a las personas que lo traicionaron y no tomará acciones legales.
"Con todo mi corazón perdono a todas las personas que me han hecho daño por los hechos de los que he sido víctima, así como a aquéllos que me han revictimizado producto de la desinformación", apunto el obispo.
Rangel Mendoza pidió a medios de comunicación respetar su decisión, al tiempo que agradeció a autoridades legales y eclesiásticas el apoyo que le brindaron, particularmente a su abogado, Luis Gasca.
El sábado 27 de abril, el obispo Salvador Rangel se ausentó y la Conferencia del Episcopado Mexicano lo dio por desaparecido el lunes 29, sin embargo, horas más tarde autoridades morelenses dieron con su paradero en el hospital Dr. José G. Parres, en Cuernavaca.
Luego de que un examen toxicológico arrojó resultados positivos a cocaína y benzodiacepina, la Fiscalía de Morelos reportó un secuestro exprés, pero la Secretaría de Seguridad modificó esa versión y afirmó que el obispo estuvo en un motel al cual entró por su propio pie.
En tanto se dio continuidad al caso con versiones contradictorias, la Conferencia Obispo se niega a presentar denuncias del Episcopado pidió no especular sobre la situación del obispo y posteriormente acusó que el tema se había politizado.
El abogado del obispo adelantó el viernes pasado que el obispo podría interponer las demandas correspondientes contra el titular de la Secretaría de Seguridad de Morelos, José Antonio Ortiz Guarneros, "por sus desafortunadas declaraciones" sobre el paradero de Salvador Rangel Mendoza.
"Hasta donde sabemos entró voluntariamente al motel con una persona del mismo sexo; esa persona después se retiró pero es todo lo que sabemos, fuimos a pedir información pero no se nos permitió, ya había llegado la Fiscalía", dijo Ortiz Guarneros el jueves pasado ante medios locales, previo al desfile conmemorativo por el Rompimiento del Sitio de Cuautla.
En respuesta, el obispo de Cuernavaca, Ramón Castro Castro, dijo que el secretario de Seguridad dio declaraciones que no corresponden.
Castro Castro, quien también es secretario general de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) añadió que confía en la versión de la fiscalía morelense, a cargo de Uriel Carmona Gándara, que señalan que el obispo de Chilpancingo-Chilapa fue víctima de un secuestro exprés.
Carmona Gándara defendió ayer la teoría del plagio al señalar que se cuenta con pruebas de ello. "Hay material de videos, de entrevistas, de testimonios, de inspecciones en los sitios. Pero pues es parte de la carpeta; el Ministerio Público tiene restringida esa información (...) Vamos a dar con los responsables", dijo.